Bodegas Menade y sus locuras sabrosas





Menade, es un proyecto a tres de la sexta generación de viticultores y bodegueros que hicieron el nombre de Rueda. 

Marco, el artífice de la viña; Richard el creador de los vinos y Alejandra, la voz de la bodega. 

Tres hermanos que en su genética llevan , en palabras de Richard, mucho carácter, poca cabeza, mucha pasión y demasiado orgullo. Por eso, en 2005  hacen la primera añada de un vino que nace con certificación de viticultura y bodega ecológica.

Hemos hablado con Richard Sanz sobre su proyecto y esto es lo que nos ha contado:
 
E.C ¿ Siempre tuvisteis claro trabajar juntos en este proyecto?.

R.S  Durante 15 años trabajamos en las marcas comerciales de la familia. Mi abuelo, un visionario, fue el fundador de vinos Sanz, y mi padre, desconfiando del futuro de los vinos de crianza biológica que se elaboraban en la zona y  poniendo en práctica su propio criterio a la hora de elaborar, emprende su camino creando la marca Palacio de Bornos.
Con mis hermanos y conmigo, la historia se repite. Con muchas vinificaciones encima y alguna que otra disparidad de opiniones, en el año 2000 quisimos huir de vinos industriales, que aunque con muy buena relación calidad precio, se alejaban de la esencia, de la raíz. Queríamos vinos con alma, vinos con carácter, elaboraciones naturales que expresaran el terreno,
Y dando un disgusto a la matriarca de la familia inician un proyecto para el que sin ninguna duda estaban preparados. 

E.C  Producís vinos ecológicos y vinos naturales. ¿Qué mercado abre este tipo de elaboraciones?.

R.S  El mercado hay que buscarlo,  y una marca de vino no se convierte en sólida o seria por tener un par de medallas en un concurso. La constancia es fundamental, y no debes defraudar a tu estilo de vino. Ahora después de 10 años nuestro vino habla por nosotros. 
Están posicionados en 25 países, y Richard atribuye el éxito a un equipo del que presume, porque en Menade no hay jefe, hay un líder que organiza, y gustoso asume ese papel, pero todos se conocen, todos se tratan de tú.

E.C  Richard, tú que eres gran defensor de las variedades autóctonas, y la verdejo es la reina en la zona, ¿ Qué crees que se ha hecho mal para que exista una relación de amor – odio hacia esta variedad en algunos foros? ¿ Qué potencial, y qué virtudes tiene para ti como enólogo?.

R.S Siempre desde mi punto de vista, y respetando el criterio de todo el mundo, creo que no se ha hecho bien la masificación de plantaciones en terrenos no óptimos. Productivos sí, pero sin un máximo de calidad.

No hemos sabido resguardar el nombre de la variedad Verdeja, no hemos sido proteccionistas de una zona que con mucho trabajo levantaron entre cuatro productores, entre los que se incluye mi familia. Y cuando el trabajo estaba hecho y la reputación creada, el atractivo empresarial y el sonido de los euros hizo llegar a los, quizá responsables, de que Rueda no se asocie con vino de prestigio; pero hay esperanza, porque hay gente haciendo cosas maravillosas.
Más que defensores somos amantes de la Verdeja, pero la investigación y la experimentación es fundamental, con esta y otras variedades. El cambio climático impone la búsqueda de la mejora.  Orientaciones, densidades de plantación y nuevas formas de viticultura procurando la adaptación.
Muy crítico, y sin ningún recato cuestiona el papel de las Denominaciones de Origen. “Soy gran defensor de la “Vinocracia “ . Las leyes no deberían limitar el tipo de vino que uno quiere hacer,  y en muchas ocasiones,  los Consejos Reguladores limitan la expresión. Las Denominaciones de Origen están anticuadas, y pueden hacer daño al futuro del consumo del vino si no evolucionan”

E.C En este camino que lleváis recorrido, haciendo balance de lo vivido, ¿ Qué cambiarías? ¿ y qué te quedarías?.

R.S Cambiaría los errores cometidos. Los errores son muy positivos, aprendes, te hacen crecer, pero tropezar dos veces con la misma piedra no está permitido. Si hay que cometer errores que sean nuevos.

Me quedo con la ilusión que seguimos teniendo. Nos enorgullece la pasión con la que trabajamos y la familia que hemos creado. Hemos cambiado un entorno, creado un paisaje volviendo al origen.

E.C . El enoturista busca volver a ese origen que mencionas. ¿Qué piensas del enoturismo y cómo lo estáis desarrollando en Menade?.

R.S El enoturismo es el futuro, la gran pepita de oro.  Deberíamos de potenciarlo porque la mejor manera de comunicar lo que quieres hacer es trayendo a la gente a casa. No hay nada que esconder, queremos expresarnos desde la bodega. Además nos divertimos. Nos gusta hacer cosas nuevas. Una bodega es algo abierto, y por eso hacemos actividades diferentes; Yoga, teatro, conciertos, y ahora, hasta tenemos  una colección de coches antiguos a los que hemos llamado  “Bio-lentos “ . ¡Qué toda la Biolencia sea con B !, reclama Richard.

En Menade son inquietos. Les gustan los retos, y ejemplo de este no parar, de querer hacer siempre algo nuevo, por fuga y por diversión, como dice Richard, son sus “Locuras Sabrosas”. Cerveza artesana con piña verde infusionada, aceite de cosecha propia, y un queso afinado en la cueva de la bodega que sirve para compartir el rato y la charla con los amigos. 

 Siempre evolucionando, siempre creando pero buscando la raíz. Eso es Menade. 


II Feria del Enoturismo Welcome Castilla y León


El próximo fin de semana, 20 y 21 de mayo de 2017, Castilla y León presentará sus Rutas del Vino y toda la oferta enoturística de la región en el Museo del Ferrocarril de Madrid.

En la segunda edición de un evento que ya se presentó, con gran aceptación de público, el año pasado, se acercará a todos los visitantes, los múltiples atractivos de un destino muy interesante   para los turistas madrileños, por proximidad y variedad. 

A través de un nutrido programa de actividades, algunas de ellas para participar en familia, Welcome Castilla y León dará a conocer la riqueza natural, patrimonial, gastronómica y de ocio que tiene una Comunidad Autónoma en la que se concentran seis Rutas de Vino certificadas: Arlanza, Bierzo, Cigales, Ribera de Duero, Rueda,  y Sierra de Francia.

Tres espacios diferentes  para disfrutar durante el fin de semana y conocer un territorio al que vas a querer escaparte:

Welcome Andén  es el lugar donde encontrarás todas las empresas que te proporcionarán información sobre el destino .

El Peque Andén con hinchables, talleres de dibujo y pintura, talleres de elaboración de pan y concursos hará las delicias de los más pequeños de la casa.

Andén del vino. Este espacio será el lugar donde por tan solo un euro podrás degustar un vino de los presentes en la feria o una tapa de productos típicos de la región de Castilla y León.

Catas de vino teatralizadas, jornadas del lechazo, talleres de aromas, catas de cervezas artesanales, degustación de alimentos típicos y un montón de actividades que puedes consultar en su programa .

Consigue tu invitación en este enlace y disfruta de Castilla y León sin salir de Madrid . 



La Primavera del Cava


En el Penedés la primavera sabe a Cava 

Durante 21 días, en una acción promovida por el  Instituto del Cava , 12 bodegas elaboradoras ofrecerán una más que interesante variedad de actividades enoturísticas para recibir la nueva estación. 

Agustí Torelló Mata, Codorníu, Giró Ribot, Gramona, Juvé & Camps, Llopart, Segura Viudad, Sumarroca,  Torelló, Vallformosa, Vilarnau y Vins el Cep son los participantes en esta iniciativa que, sin ninguna duda, hará disfrutar a los amantes del Cava .

Con propuestas tan atractivas como singulares, repartidas del 1 al 21 de mayo, se intenta impulsar el enoturismo de la zona.

Cata de flores y Cavas entre viñedos, lectura de cuentos para adultos, carrera en las viñas, recorridos en bicicleta, excursión en Winejeep o avistamiento de las cepas en plena floración desde un helicóptero son algunas de las actividades programadas para vivir la llegada de la primavera en el viñedo. 

Puedes consultar la programación completa de actividades y reservar tus plazas en la que más te apetezca en el siguiente enlace 

Celebra la llegada de la primavera con burbujas y cuéntanos tu experiencia.  



Encomienda de Cervera. Calidad en mayúsculas





Cuando las cosas se hacen bien, con profesionalidad, dedicación y cariño, los resultados suelen acercarse a la excelencia; Y si lo obtenido no es lo esperado, basta con insistir. Constancia y perseverancia son dos buenas herramientas para la consecución de sueños y proyectos. 

La calidad de un proceso, un producto o un servicio se mide y cuantifica con relativa facilidad. Es más, después de medida, la calidad, también se puede certificar, como es el caso de los vinos que proceden  de  las tierras negras de origen  volcánico  donde está enclavada la bodega Manchega Encomienda de Cervera. Estos vinos, influenciados por el Volcán “Maar de la Hoya de Cervera” y regados por las cercanas aguas del río Jabalón, tienen certificada su riqueza en polifenoles, la virtud de contener en su composición una cantidad de antioxidantes superior a la media.

¿ Pero quién certifica la calidad humana?

Desde ya pido disculpas, pero no voy  a hablar demasiado de los vinos de esta bodega, ni tan siquiera voy a transcribir mis notas de cata, porque sin pretenderlo, quedaron eclipsados por el equipo de personas que los hacen y representan. 

Tuve la oportunidad de compartir un hospitalario almuerzo con ellos en la Casa Principal de la finca, una construcción tradicional con patio de corrala, donde además de la comida casera, disfruté de la presencia de Don Aurelio Espinosa, alma máter de este proyecto vinícola. 

El psicólogo Guillermo Ballenato Prieto dice que la calidad humana surge de una especial combinación de orgullo y humildad. Del orgullo de ser quienes somos y de lo que hacemos, y de la humildad de reconocer que aún podemos mejorar. 

Esta es la impresión que me llevé de Don Aurelio después de un par de horas de charla distendida. Un empresario, con espíritu empresarial, gran defensor del  I + D, que cuestiona procedimientos impregnados de inercia en busca de la continua mejora, y pone corazón y cabeza en lo que hace dotándolo de la, a veces escasa, calidad humana en el mundo empresarial. 


Visitar  Encomienda de Cerveza y su proyecto es  sin duda una experiencia recomendable. Por sus vinos, aceites y quesos, por el maravilloso paisaje mediterráneo que  componen encinas, olivos, enebros y 60 hectáreas de viñedo ubicadas en el término municipal de Almagro, junto al macizo volcánico de Campo de Calatrava. Por el aroma que en el aire dejan las plantaciones de tomillo, lavanda y romero, por el legado  histórico que impregna los muros de la propiedad. Y compartir sobremesa con las personas que componen este proyecto ha sido todo un regalo. 
Gracias Don Aurelio, José Manuel y Óscar.



Parafraseando de nuevo a Guillermo Ballenato, “La perfección puede ser una utopía, pero la calidad no lo es”


Casar 2014 , Vino de Montaña




Hablar de la variedad de uva Mencía y  que nos transportemos inmediatamente con el pensamiento a la comarca Leonesa del Bierzo suele ser casi un acto reflejo para muchos amantes del vino.

Son no pocas las bondades de esta región y muchos los motivos, utilizálos si quieres como escusa, para  escaparse  y disfrutarla.
Historia que impregna el camino de peregrinos a Compostela, paisajes únicos declarados Patrimonio de la Humanidad, y por supuesto, mil encantos enogastronómicos de los de guía para gastrónomos.
Yo, que soy de buen comer y buen beber me voy a centrar en esto últimos, y para seguir centrándome lo haré en la botella de vino que acabo de abrir; Casar 2014 , de bodega Casar de Burbia.


Definido por la familia Fernández, creadora del proyecto, como vino de Montaña, de la ladera norte de la montaña de Valtuille de Arriba, para ser precisos. Elaborado con la uva que procede de viñedos propios situados en el inicio de una pendiente que acumula la arcilla que sedimenta la lluvia.

Y cuando acerco la copa  a la nariz no disimula, ¿ para qué va a hacerlo si es un 100% Mencía orgulloso de serlo?.
Explosión de aromas primarios que ahora sí, me han transportado definitivamente al Bierzo y a la expresión más auténtica del varietal tinto que abandera.
Podría quedarme un rato oliendo el vino, disfrutando de los aromas intensos de fruta y flores , pero la boca se impacienta y con el primer sorbo descubro que la fruta ganó la batalla a los doce meses de crianza en Roble Francés.

Incisivo pero equilibrado, con paso largo y toque cálido. Sin artificios, con la única pretensión de mostrarse tal cual es por el lugar del que procede.

Un vino para disfrutar en mesa y mantel acompañado de un buen botillo.